Preguntas Frecuentes

¿Si voy al psicólogo es porque estoy loco?
Aún se tiene la idea de que los que van al psicólogo es porque tienen problemas mentales. Y si bien esa es una de las ramas de la ciencia, no es la única.
Los motivos para iniciar terapia son los que tú decidas: estar viviendo un momento difícil que no estás sabiendo manejar. No conseguir mejorar una relación que para tí es importante, ya sea con tu pareja, con un familiar o un amigo, es motivo para iniciar terapia. Querer estar mejor porque sabes que no te sientes todo lo bien que quieres, es más que suficiente para iniciar terapia.



¿Puedes tratar mi problema?
Una de las funciones de la primera sesión, es dar respuesta a esta pregunta. Si al contarme el motivo de consulta, considerase que está fuera de mi campo de trabajo, en función de la problemática que presentase, se valoraría derivar al paciente a otro tipo de profesional, (neurólogo, psiquiatra...)


¿Ir al psicólogo significa que no he sido fuerte para solucionar mi problema?
Tristemente, también se relaciona la asistencia a terapia con la debilidad. Y es justamente todo lo contrario. Decidir iniciar una terapia psicológica, supone un nivel de maduración importante. Significa que uno decide hacerse responsable de su propia vida, y es por ello por lo que quiere tomar las riendas para que todo vaya mejor.

A veces pongo la metáfora de que la terapia es como una especie de muleta que nos ayuda a caminar después de una operación. No vamos a necesitarla siempre. Pero desde luego, durante el periodo de convalecencia, nos va a ayudar a manejarnos mucho mejor en nuestro día a día. Cuando podamos caminar sin ella, la dejaremos. Pero mientras tanto, ¿por qué negarse a estar mejor?


¿Cuánto dura la terapia?
Realmente es una pregunta muy difícil de contestar. La realidad es que depende de cada persona. El motivo de consulta, el propio proceso que te ha llevado hasta ahí, así como hasta dónde quieres llegar, determina en gran medida el tiempo.


¿Va a tener que venir mi familia a alguna sesión?
No es lo frecuente. No obstante, en ocasiones se considera adecuado, o hay interés en el paciente. En todo caso, se valora la posibilidad conjuntamente.


¿Con qué frecuencia tengo que ir a terapia?
La frecuencia de las sesiones viene determinada por las características de la situación que se quiere trabajar. Sin embargo, lo habitual es que las primeras sesiones sean semanales, y que una vez comienzan a cumplirse objetivos, tiendan a disminuir la frecuencia, hasta que llega una fase de seguimiento donde las sesiones se alargan en el tiempo.  

Cabe hacer hincapié en que cuanto más sistemático se es en la asistencia al comienzo de la terapia, más rápido llegan los resultados.


¿Qué ocurre si anulo una sesión?
En el caso de tener que anular una sesión, es importante que avises con 24 horas de antelación, ya que sino deberás abonar la sesión sin haberla realizado. La razón es que cuando se programa una sesión, se reserva ese tiempo que es sólo para tí.


Antes de acudir a terapia, ¿puedo consultarte si tengo otras dudas?
Por supuesto. Puedes escribirme un correo a amandalanchas@cop.es y te contestaré en cuanto me sea posible. También puedes ponerte en contacto telefónico llamando al número de teléfono 656867419